Contador de visitas

¡Yo pensativo e inspirandome!

¡Yo pensativo e inspirandome!
Jaja

lunes, 1 de febrero de 2010

¡Alma y corazón siempre van ligados!

Desperté, miré hacia ambos lados y no estabas, en ese momento mi vida se quedó en blanco, un simple suspiro, unas lágrimas, un pequeño mundo sin ti, era lo que me quedaba. Pensé que era un sueño, pero mi vida ya había dado un vuelco brutal.

Ya no me importa lo que digan, esas pequeñas cosas son tan simples que la vida te las devuelve de una manera más compleja aún...lo mejor es callar, quedarse en silencio y que se envuelva en el alma.

Cada noche que faltabas moría mi alma, ahora poco a poco despierta sin miedo, tiene ganas de echar a correr y no parar, gracias a ti me he dado cuenta que puedo seguir sólo! Me he dado cuenta que en cada ratito que pasábamos juntos no podía dejarte escapar...ahora he despertado y he aprendido a vivir en la soledad!

Cai, pero hoy he vuelto a levantarme, he aprendido a no mirar atrás, ahora todo sigue igual que antes. Ahora hablo en silencio, he aprendido a echarte de menos sin querer..! Pienso en tu mirada y lloró desenfrenadamente, pienso en tu sonrisa y en tus labios felices al reír y quiero besarlos, tocarlos, acariciarlos suavemente con el roce de mis labios, quiero sentir esos suaves, cálidos y tan perfectos labios cerca de mí.

Quiero ser tú, quiero que seas yo, quiero que seas mi luz en el camino tan oscuro de ésta mi soledad, sólo aprendí a calmar mi sed escribiendo en verso, maldito el desprecio que hicistes, maldita quedó mi alma por enfrentarse a ti, tu ausencia crece cada segundo, todo se refleja cada noche que faltas, mi alma se quedó vacía, quiero poder saciar tus lágrimas, quisiera escuchar el suave latido de tu corazón.

Escribo para disimular que soy un chico hambriento y sediento de ti. Creo que lo tengo todo controlado, pero me volviste a decir no, y caí destronado del reino del que me sentía rey y señor. En esa madrugada sentí como perdí tu mirada, volví a sentir a esa distancia que poco a poco nos separaba, el sol pasaba y el día se iba tan lento como te fuistes tú.

Muero por dentro, simplemente no te tengo, crucé tierra, mar y aire, todo eso para caer, hundirme y volar sin paracaidas. Quiero que sepas que has sido capaz de escuchar mi silencio, mi corazón ha florecido. Gracias.

No hay comentarios: